– Tratamientos novedosos y convencionales ayudan a lucir un cutis saludable –

Alrededor del 85 por ciento de las personas tendrá acné, en cualquiera de sus manifestaciones, en algún momento de su vida, por lo que es la causa más común de consulta en el dermatólogo. Puede ocurrir a cualquier edad, incluso en recién nacidos, pero afecta más a adolescentes, mujeres y hombres jóvenes.

El acné se cataloga como no inflamatorio a: espinillas, puntos negros y comedones cerrados; e inflamatorio a: comedones abiertos, cuando el quiste sale al exterior de la piel.

¿QUÉ LO PRODUCE?

El origen del acné es multifactorial. Entre las causas están cambios hormonales, falta de higiene adecuada o excesiva o dieta predominante en alimentos con alto índice glicémico -azúcares-. Asimismo, ciertas sustancias o medicamentos como vitaminas del complejo B, antidepresivos, esteroides y suplementos nutricionales para atletas. También, el uso de algún maquillaje o crema inadecuados puede producirlo.

Un 70 por ciento de los pacientes con acné son adolescentes, debido a una inflamación hormonal derivada de andrógenos que estimulan la producción de hacerlas en la piel.

¿CÓMO TRATARLO?

Si el paciente drena y extrae los quistes del acné por sí solo, puede producir infección, empeoramiento, que puede ser tópico, para eliminar bacterias o reducir el aceite que obstruye los poros.

El tratamiento dependerá de cada paciente y se recomienda antes de que aparezcan los quistes para prevenir las cicatrices. Si es leve, se usan productos que contengan peróxido de benzoilo o ácido salicílico, para limpiar la piel. Este suele durar de cuatro a ocho semanas y se aplica en casa; no resulta efectivo si hay quistes o nódulos.

Está también el tratamiento sistémico, que actúa en todo el cuerpo, cuando hay quistes y nódulos o inflamación. Pueden ser antibióticos, fármacos para tratar cambios hormonales o la isotretinoína, que trata todas las causas del acné.

También hay terapias modernas, que se pueden combinar con medicamentos, como láser, peelings químicos, mascarillas de luz y microdermoabrasión, que se incluyen de manera detallada en este espacio.

PSICOLOGÍA

Afecta la autoestima. Muchas personas con acné aseguran que esta enfermedad inflamatoria de la piel les hace sentir incómodas en su entorno social, especialmente con amigos, y les hace ausentarse de sus estudios o trabajos. El acné puede afectar la autoestima y conducir a la depresión.

“Muchos estudios han concluido que adolescentes que creen que tienen acné severo son propensos a quitarse la vida”.

Por ello, se debe tratar, especialmente, en adolescentes y adultos jóvenes. No hay un paciente que presente tanto estrés social como el que tiene acné, que lo hace introvertido y reservado. Según la gravedad de la enfermedad, puede ser incapacitante, por lo que se debe tratar de manera temprana por las complicaciones psicológicas que puedan tener.

EL ACNÉ HABLA DE SU ESTILO DE VIDA

Aparece, comúnmente, en el rostro, tórax y espalda, áreas donde se concentra mayor cantidad de glándulas sebáceas. En la cara, se origina según detonantes relacionados con conductas de la persona.

Frente: Se vincula con el aparato digestivo. Indica que la persona come demasiadas grasas, alimentos procesados, altos en azúcares o carbohidratos.

Alrededor de las cejas: Se asocia con el hígado y riñones, por lo que se produce cuando la persona bebe alcohol con frecuencia.

Mejillas: Esta área se relaciona con los pulmones, por lo que suele aparecer en fumadores o individuos que están en contacto con la contaminación. También puede deberse a maquillajes con silicona y aceites.

Línea capilar: Es signo de que se utiliza en esta área productos con siliconas y aceites.

Nariz: Se asocia el acné en esta zona con el estrés o tensión acumulada.

Mandíbula y barbilla: Se debe a descontrol de niveles hormonales derivados de variaciones premenstruales del estrógeno o la testosterona.

¿CÓMO SE PRODUCE?

El acné se origina cuando un poro se obstruye con exceso de sebo y células muertas de la piel, al principio, y luego, con bacterias.

CONSEJOS

  • Consultar con el dermatólogo si aparece acné entre los 8 y 12 años de edad o si hay antecedentes en la familia.
  • No auto recetarse. Hay medicamentos con contraindicaciones.
  • Cremas y maquillajes comerciales, pero no deben contener aceites y sustancias que bloqueen los poros.
  • Humectar la piel con productos que no contengan silicona ni aceite. Descontinuar el uso de los que provoquen acné.
  • El tratamiento antes de que aparezcan los quistes puede ayudar a prevenir las cicatrices.
  • Ingerir abundante agua, comer frutas y verduras a diario y moderar el consumo de alimentos con grasa y azúcares.
  • Limpiar el cutis con agua y jabón neutro en la mañana y noche, para evitar la aparición de acné.
  • Se recomienda utilizar productos que son sustitutos de jabón que no cambian el pH de la piel.

FUENTE: Prensa Libre