Dolencia del recto requiere atención médica

Dolor o ardor al sentarse o al defecar, prurito y sangrado, son algunos de los síntomas de quienes padecen hemorroides.

Las hemorroides son muy comunes. Son el resultado del aumento de presión en el ano. Esto puede ocurrir durante el embarazo, el parto o debido al estreñimiento. La presión provoca que las venas y los tejidos anales se hinchen. Este tejido puede sangrar, a menudo durante las deposiciones.

Las hemorroides pueden estar dentro o por fuera del cuerpo. Las internas se presentan justo dentro del ano, donde comienza el recto. Cuando son grandes pueden salirse (prolapso). El problema más común con las hemorroides internas es el sangrado durante las deposiciones. Las externas ocurren por fuera del ano. Pueden causar dificultad para limpiar la zona después de una deposición. Si se forma un coágulo de sangre en una hemorroide externa, puede ser muy doloroso (hemorroide externa trombosada).

CAUSAS

Las hemorroides se desarrollan debido al aumento de la presión en el piso pélvico la cual generalmente es consecuencia de pujar muy fuerte al defecar y de sentarse durante períodos largos.

PREVENCIÓN

Hay varios cambios en el estilo de vida con los que las personas pueden intentar para evitar el aparecimiento de hemorroides.  Este incluye hacer ejercicio regularmente, beber mucha cantidad de líquidos como el Té Verde, agua pura, jugos naturales; consumir una alimentación sana con alto contenido de fibra -mejora la motilidad intestinal-, y evitar sentarse durante períodos prolongados.

TRATAMIENTO

Cuando aparecen hemorroides externas, las medidas de autocuidado normalmente logran aliviar las molestias.

Remojarse en un baño tibio o en baño de asiento colocado en el escusado con agua simple durante 10 o 15 minutos, dos o tres veces al día, puede reducir la hinchazón de las hemorroides.

Aplicar hielo o compresas heladas también pueden aliviar la hinchazón y el dolor. Los analgésicos como el ibuprofeno, la aspirina o el acetaminofén, igualmente pueden ayudar a aliviar algunas molestias.

Cuando las hemorroides duran más de una semana, pese a los remedios caseros, o provocan dolor y molestia, entonces es momento de hacer una cita con el médico, o bien, si se tiene un sangrado doloroso por el recto para que el profesional pueda descartar otras afecciones más graves.

FUENTE: Prensa Libre 15/11/2016 – Buena Vida